Madera tratada en autoclave; tipos de tratamiento

La madera tratada en autoclave tiene mayor durabilidad frente a agentes bióticos degradadores como son los hongos o insectos xilófagos. Esto se consigue mediante la introducción en la madera de productos protectores por medio de autoclaves de vacío – presión o vacío – vacío. Es importante tener en cuenta antes de aplicar este tratamiento si la especie elegida es impregnable y su durabilidad natural. 

Por lo general, la madera tratada en autoclave puede utilizarse para cualquier fin, desde obra civil, mobiliario urbano, carpintería, construcción…

Dependiendo de donde se va a colocar la madera y su exposición, la norma UNE-EN 335 determina las aplicaciones según las clases de uso y establece diferentes penetraciones y retenciones de producto:

Una clase de uso 3 en el que el producto de madera no está bajo cubierta ni en contacto con el suelo, puede estar expuesto a la intemperie de forma permanente o protegido de la intemperie pero sometido a humedad constante.

Clase de uso 4 en la que el producto de madera está en contacto con el suelo o agua dulce y expuesto a humedad constante.

Clase de uso 5 donde el producto de madera está permanentemente en contacto con agua salada.

Según el Registro oficial del Ministerio de Sanidad y Consumo, en España sólo se podrían utilizar productos de madera que han sido tratados con productos protectores registrados. Los productos protectores que se pueden utilizar son; protectores hidrosolubles, protectores en disolvente orgánico, protectores hidrodispersables, productos mixtos y protectores orgánicos naturales.

Antes de ver los métodos de tratamiento de madera con autoclave, es importante saber que un autoclave es un cilindro metálico cerrado en el que se inserta la madera y un producto protector que penetrará en ella.

Los métodos de tratamiento por autoclave de madera son:

Autoclave con vacío – presión: Este método consigue controlar la penetración y retención de los protectores en la madera. Para aplicar este tratamiento la madera tiene que tener menos de un 28% de humedad y se introduce el producto protector en la madera variando la duración e intensidad de las presiones y vacíos aplicados que dependen a su vez, de la impregnabilidad de la especie de madera, el grado de protección que se requiere y el protector utilizado.

Autoclave doble vacío o vacío – vacío: Este método permite la entrada del producto protector en la madera aplicando vacío dentro del autoclave. De esta manera, se consigue realizar una protección perimetral de la pared celular sin llegar a rellenar el interior de las células. Su nombre se debe a que se aplica un vacío inicial para introducir el protector a presión atmosférica y posteriormente un vacío final que regula la cantidad de producto introducido. Este tratamiento se utiliza principalmente en elementos de madera previamente elaborados como carpintería (ventanas, revestimientos…).  En este método la madera tiene que tener menos del 18% de humedad.

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