Lo último en madera modificada
La madera es un material con unas excelentes propiedades y altamente durable, sin embargo, algunas limitaciones en los diseños pueden hacer imposible al arquitecto decantarse por madera. Estas limitaciones cada vez son más reducidas con los últimos resultados en innovación, hoy os contamos el ejemplo de Accoya®, madera modificada sin el uso de productos tóxicos.
Existen construcciones en Japón con estructuras de madera de hace miles de años que hoy en día siguen en pie y en perfecto estado, hace poco veíamos el ejemplo de la casa de madera más antigua de Europa que ha cumplido más de 700 años y sigue estando habitable.
En definitiva, la madera es un material que se ha utilizado desde el origen de la historia y a lo largo de los siglos ha podido demostrar sus propiedades. Hoy en día sigue adaptándose a las necesidades de la construcción y los diseños, en los casos más difíciles gracias a la innovación e investigación, que ofrece resultados que cubren cualquier necesidad.
Ejemplos diarios como las cucharetas de madera o los barcos que se hacían íntegramente en madera a pesar de estar expuesta a cambios de temperatura y humedad, nos demuestran que la madera tiene propiedades que con un buen diseño y selección de especie puede ajustarse a cualquier entorno, aunque existen limitaciones en algunos diseños que llevan a la selección de otros materiales menos sostenibles.
Por este motivo, la industria de la madera continúa investigando y desarrollando nuevos productos y técnicas que mejoran el comportamiento de este material. Uno de los últimos ejemplos tras ocho décadas de investigación es la madera de Accoya®, madera modificada que mejora las prestaciones como durabilidad y estabilidad.
La madera de Accoya® es madera de pino radiata de Nueva Zelanda que se ha modificado a nivel molecular. Esta modificación no incluye elementos químicos o dañinos, sino que utiliza los propios elementos químicos que contiene la madera. Esto se consigue bloqueando los grupos hidróxido de la madera que absorben la humedad, los responsables de captar moléculas de agua del ambiente. Para ello, se trata la madera en autoclave con anhídrido acético liberando ácido acético, así se impide que el agua entre en la madera durante toda su vida útil.
Esta modificación supera el rendimiento térmico de la madera hasta en un 40%, lo cual además de una gran estabilidad, reduce el consumo energético del edificio donde se coloque, y al ser madera; un material renovable, natural, sostenible y reciclable contribuye al cuidado del medio ambiente.
Además, esta madera admite cualquier acabado; opaco o translúcido y ofrece una garantía de hasta 50 años en su uso en exterior. Por poner un ejemplo; con esta madera podemos proyectar puentes con madera expuesta, capaces de soportar cargas de sesenta toneladas con una vida útil de más de setenta años. Admitiría acabados en color negro o incluso esquinas ingleteadas.
Si te interesa esta madera o quieres obtener más información puedes contarnos qué necesitas pinchando aquí y te ayudaremos a encontrar proveedor.
Fuente: www.accoya.com
